El espacio blockchain en Suiza, especialmente en el ámbito de la tokenización, está marcado por una serie de innovaciones y un enfoque regulatorio avanzado que han colocado al país en una posición líder en la tecnología financiera. En una reciente entrevista en el programa de Token City, Gabriel Jackard, CEO de Arbitary y figura prominente en el sector de la tokenización, detalló las claves del éxito suizo y discutió cómo estas podrían inspirar a otros países en la adopción de la tokenización. A continuación, exploramos los temas tratados en la entrevista, centrando nuestra atención en la tokenización de activos en Suiza y sus implicaciones en el mercado financiero global, así como en el debate que esta tecnología genera.
Suiza ha adoptado un enfoque funcional y generalista en la regulación de criptomonedas y blockchain, evitando regulaciones excesivamente específicas. Este enfoque permite la integración de la tecnología cripto como si fuera cualquier otra industria, favoreciendo un ambiente propicio para la innovación y el crecimiento.
El marco regulatorio suizo facilita, por ejemplo, la creación de empresas basadas en criptoactivos sin la necesidad de cuentas bancarias tradicionales y permite la tokenización de derechos de manera flexible y segura.
Desde 2017, Suiza ha sido pionera en definir legalmente los tokens y en establecer directrices claras para la realización de ICOs, lo que ha sido crucial para proporcionar seguridad jurídica a los inversores y desarrolladores.
La posibilidad de tokenizar cualquier tipo derecho hace que sea fundamental definir bien el tipo de token que lo represente. La Autoridad Supervisora del Mercado Financiero de Suiza (FINMA) establece las siguientes categorías de tokens.
La tokenización de derechos usualmente cae bajo la categoría de tokens de activos. Esto es crucial para asegurar que el token cumpla con las regulaciones pertinentes, especialmente si el token ofrece derechos similares a los valores tradicionales, como acciones o bonos.
Jackard subraya la importancia de la educación especializada en blockchain para desarrollar competencias necesarias en la creación y auditoría de contratos inteligentes.
La propuesta legislativa recientemente aprobada en Ginebra también busca cubrir la cadena completa de necesidades de la industria cripto, proporcionando un ecosistema integral que incluye educación, certeza legal y un entorno regulatorio mejorado.
El compromiso del sector financiero suizo con la tecnología blockchain y la tokenización se manifiesta en las actividades de bancos como Sygnum y SEBA, que no solo ofrecen servicios de custodia de criptoactivos, sino que también desarrollan plataformas para el comercio de tokens de seguridad. Esta integración facilita el acceso seguro y regulado a activos digitales para inversores minoristas y grandes entidades, siendo fundamental para su adopción generalizada. La participación de estos bancos destaca por combinar innovación con tradición, asegurando su relevancia en el mercado digital y atrayendo a una nueva generación de clientes financieros.
Además, la licencia fintech introducida por la FINMA en 2018 como "licencia bancaria ligera", permite a las fintech operar con menos restricciones que los bancos tradicionales, con un límite de aceptación de depósitos públicos de hasta 100 millones de francos suizos, sin permitir la inversión de estos fondos ni la generación de intereses. Este marco legal facilita la incorporación de nuevas tecnologías en las operaciones financieras y permite a entidades más pequeñas participar en el mercado financiero digital, promoviendo así la innovación y la diversificación de servicios en el sector financiero suizo. Este enfoque regulatorio evidencia cómo Suiza adapta su marco legal para apoyar la evolución tecnológica, manteniendo al mismo tiempo la estabilidad y seguridad del sistema financiero.
Las Finanzas Descentralizadas (DeFi) presentan un modelo radicalmente distinto al del sistema financiero tradicional, operando sin intermediarios y, en muchos casos, sin una autoridad centralizada que supervise las transacciones. El reto regulatorio que esto presenta es significativo: ¿Cómo se regula una entidad que es, por su propia naturaleza, descentralizada?
Suiza está abordando este desafío mediante la adaptación de su marco legal para incluir DeFi en su clasificación de servicios financieros, siempre que estas actividades se alineen con las leyes financieras existentes.
La clave aquí es el principio de "mismo negocio, mismos riesgos, mismas reglas", que busca aplicar regulaciones consistentes sin sofocar la innovación. Sin embargo, esto también plantea preguntas sobre la eficacia de la regulación cuando se enfrenta a protocolos que son verdaderamente descentralizados y globales por naturaleza.
Mientras Suiza no es miembro de la UE, las regulaciones como MiCA (Mercados de Criptoactivos) de la UE tienen el potencial de influenciar indirectamente el entorno regulador suizo. MiCA busca establecer un marco regulador armonizado para los activos criptográficos en toda Europa, algo que podría establecer estándares que Suiza tendría que considerar para mantener el acceso al mercado europeo.
El enfoque de Suiza hacia la blockchain y la criptomoneda ofrece un modelo interesante para otros países que buscan fomentar la innovación mientras mantienen un marco regulatorio robusto.
Token City es el puente definitivo hacia a la economía tokenizada (tEconomy), en la que las empresas tokenizadas (tEnterprises) crean sus mercados de cripto activos (tMarkets), abiertos a inversores globales (tCitizens).