BlackRock, la mayor gestora de activos jamás creada con, actualmente, 8 billones (trillions) en activos bajo gestión, se une al futuro del token al igual que ya está haciendo el resto de los grandes gestores de fondos y motores de los mercados financieros. Emitir y gestionar tokens requiere de plataformas eficaces y de rápida implantación, personalizables y con costes de operación bajos.
El CEO de BlackRock, Larry Fink, ha dicho recientemente durante un evento patrocinado por el New York Times que "la próxima generación para los mercados, la próxima generación en valores financieros, será la tokenización de valores (securities)". Fink continuó describiendo las principales ventajas para su empresa del uso de la tecnología blockchain, como la liquidación instantánea, la reducción de intermediarios y la "drástica reducción de las comisiones".
Si te preguntas cómo una empresa como BlackRock puede elogiar la tecnología blockchain tan abiertamente justo cuando graves escándalos sacuden el mundo de las criptomonedas, probablemente estés confundiendo la tecnología blockchain con las criptomonedas. La realidad es que, aunque las criptomonedas se basan en la tecnología blockchain, también lo hace una porción creciente de las finanzas tradicionales, sin relación con las cripto más allá del uso de blockchain.
En Token City aplicamos al mundo de las finanzas tradicionales la tecnología blockchain, tokenizando activos en estricto cumplimiento de la normativa vigente y, como muestran las declaraciones del CEO de BlackRock, no estamos solos. BlackRock, JPMorgan, Goldman Sachs, Citi y muchas otras corporaciones trabajan activamente en la tokenización de activos, al igual que un creciente número de startups. Estamos creando un mundo donde los activos de la economía son representados por tokens en el mundo digital.
Por eso Token City cuenta con todas las herramientas necesarias para que cualquier empresa, financiera o no, comience inmediatamente a tokenizar y generar financiación alternativa, con costes más que asumibles.
El uso de tokens permite una amplia gama de aplicaciones comerciales, incluyendo la tokenización de bonos, fondos, acciones, bienes inmuebles, deuda, hipotecas, seguros de vida o mercados de reclamaciones sanitarias, entre otros.
La tecnología blockchain ofrece un vasto abanico de oportunidades para estas clases de activos, ya que
al tokenizarlos digitalizamos el ciclo de vida de los mismos, mejorando enormemente la eficiencia en costes y tiempos. Estas eficiencias son el núcleo de lo que supone aplicar tokens al sistema financiero regulado.
Pero la tokenización de activos no sólo permite reducir costes, agilizar plazos y desintermediar procesos, también nos permite ampliar el alcance de la inversión, eliminando barreras de entrada al permitir el fraccionamiento de activos. Un inversor puede no tener los fondos necesarios para poseer un edificio entero, pero sí para poseer una pequeña parte del token que representa esa propiedad.
Parte del atractivo de las criptomonedas es que se trata de un espacio no regulado, en el que las empresas pueden actuar con rapidez y permitir a los clientes entrar en un nuevo (y potencialmente peligroso) panorama de oportunidades. Hay muchas oportunidades de ganar dinero, pero también abundan las estafas y las actividades fraudulentas, incluso por parte de algunos de los actores más consolidados del sector.
Aún así, la promesa del mundo cripto y DeFi reside en hacer posible un sistema financiero alternativo, completamente descentralizado, en el que los participantes realicen sus operaciones e intercambien activos interactuando con un protocolo, en lugar de recurrir a intermediarios (la web 3.0).
DeFi y las criptomonedas existen completamente en paralelo a la tokenización en finanzas tradicionales, donde los controles y las regulaciones obligan a los agentes económicos a rendir cuentas, y los experimentos financieros se llevan a cabo en entornos controlados conocidos como "sandboxes" regulatorios.
La mayoría de los participantes en el espacio DeFi esperan seguir desregulados, mientras que el sector financiero tradicional pide una regulación clara y adecuada que permita la tokenización masiva de los activos y sus ciclos de vida, con el objetivo de abordar problemas muy concretos y eliminar ineficiencias para crear valor y atraer clientes gracias al uso de tokens.
A eso se refiere Larry Fink, CEO de BlackRock, y eso es lo que estamos haciendo en Token City. Poco a poco el gran público va descubriendo que la aplicación de blockchain a escala se está dando en al ámbito de las finanzas aburridas, reguladas y seguras.
Token City is the ultimate bridge to the tokenized economy (tEconomy), in which tokenized companies (tEnterprises) create their cryptoasset markets (tMarkets), open to global investors (tCitizens).